martes, 26 de abril de 2011

El jardín natural: la mínima intervención

Es creencia general pensar que detrás de un jardín con un aspecto impecable hay grandes esfuerzos. Además es común asociar a la idea de jardín largas y duras horas de trabajo. Trabajo en lugar de Disfrute, Esfuerzo en lugar de Descanso. El panorama no es muy alentador.
La cuestión es: ¿por que existe este concepto de jardín?
Hay que decir que el jardín es una creación del hombre. En muchos casos su mantenimiento se realiza a través de la aportación de varios inputs externos (agua, fertilizantes, herbicidas, insecticidas, fungicidas), a parte obviamente de duro trabajo. Nos parece lo normal y nunca reflexionamos sobre el porque de tantos gastos y esfuerzos. Quizás las causas radiquen en nuestra manera de relacionarnos  con la naturaleza: LUCHAR contra de ella en lugar de COLABORAR con ella. La comprensión de los mecanismos naturales (al menos en parte) es un factor clave en el proceso de creación del jardín. En la naturaleza ocurren múltiples interacciones entre plantas, entre suelo y planta y entre estas y los insectos, los animales y los microorganismos. Pues, estas mismas interacciones ocurren en un jardín y el mismo jardinero es solo una variable mas del sistema jardín.
Hay que entender y ACEPTAR que el jardín es una Creación Viva que crece, evoluciona e interactúa con otros seres vivos, que el jardín no es un sistema cerrado y no es algo inmutable.
Si en nuestro jardín es preciso regar sobremanera, tratar con herbicida, fertilizar, rociar con insecticidas y fungicidas, recurrir a podas drásticas, esto es porque estamos actuando en contra de la naturaleza, desperdiciando recursos y dañando el medio ambiente.
¿Es este el precio que hay que pagar para man-tener un jardín? Evidentemente no, hay algo que no está funcionando. La naturaleza con su belleza nos demuestra que todo esto no es necesario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario